Dos agujas: como distinguir derecho y revés

Cuando llevamos una temporada haciendo punto, no tenemos problema para saber si el punto que nos encontramos en la aguja de la mano izquierda está del derecho o del revés pero para las menos iniciadas, esto puede ser complicado.

Para ellas van estas fotografías y explicaciones:

Vamos a mirar la fila de puntos de color rosado que están en la aguja. Es la primera vuelta de este color y por eso se ve muy bien la diferencia entre unos puntos y otros. Hemos hecho 1 punto del derecho y un punto del revés en toda la fila.

Todos los puntos rosa llevan una bufanda amarilla pero los que se nos presentan del derecho están más acalorados y llevan la bufanda en los hombros y colgando hacia abajo como se puede ver en el óvalo verde que con tanto arte he dibujado. (jeje)

Los puntos que se nos presentan del revés son los frioleros, llevan la bufanda tapándoles la boca y la nariz, como se ve en el óvalo blanco.

Aquí con más detalle:

Así que si en el patrón nos dicen que tenemos que hacer los puntos como se nos presentan, ya sabemos que tenemos que mirar la bufanda...

Aquí os muestro otra imagen en la cual quizás se aprecia mejor:

Espero que esta explicación sea de ayuda para las más novatas en este pasatiempo tan agradable y práctico que es el tejer y que ahora, además, está de moda.

Un collar para amantes del arte

Como historiadora del arte, no es sorprendente que a Miriam le guste añadir a sus diseños de bisutería cuadros de pintores reconocidos. No lo puede remediar, le encanta la pintura.

En este collar de color rosa que os mostramos hoy aquí, aparece el cuadro Regina Cordium de Dante Gabriel Rossetti (1828 - 1882)

Como os podéis imaginar, las posibles combinaciones son infinitas ya que se  puede cambiar tanto el color como la imagen. Cada uno puede elegir el cuadro que más le guste y encargarlo indicando el color que quiere.

Yo estoy dudando entre la Venus de Boticelli o Los Girasoles de van Gogh... ¿Cual quedaría mejor?

Patucos a dos agujas para todas las tallas

Os presento los patucos que me han salido esta semana con una lana multicolor y luego otras lanas a juego:

Estos patucos son muy fáciles de hacer: no hay que aumentar, no hay que disminuir, no hay ni que cerrar los puntos 

al final y además se adaptan al pie que da gusto.

¡Son ideales para relajarse tanto haciéndolos como 

llevándolos puestos!

La lana es un poco más gorda que la lana normal y 

utilicé agujas del número 5  1/2.

Se montan 35 puntos y se tejen 10 centímetros a 

punto bobo, es decir, todo del derecho. Esto será la 

parte del talón.

Yo voy haciendo los dos patines a la vez para 

asegurarme de que los hago iguales.

A partir de ahí se empieza a tejer punto canalé 

simple, 

esto es:

1 del derecho, 1 del revés, 1 del derecho, 1 del 

revés, 

hasta el final de la hilera.

y la vuelta siguiente: 1 del revés, 1 del derecho, 1 

del 

revés, 1 del derecho, hasta el final de la hilera.

Repetimos estas 2 vueltas hasta tener, en total, 

aproximadamente 2 1/2 centímetros menos que el 

largo del pie.

A continuación hacemos una vuelta como sigue: 2 juntos del derecho, 2 juntos del derecho, así hasta el final de la hilera, el último punto se hace del derecho.

Ahora cortamos la lana, dejando una hebra larga, como 50 ó 60 centímetros y con una aguja lanera pasamos la hebra por todos los puntos que están aun en la aguja. Sacamos la aguja y tiramos suavemente de la hebra para cerrar la puntera de los patines, luego con la misma hebra cosemos el empeine, rematamos bien y cortamos. Solo nos queda coser el talón y hacer el otro patín exactamente igual.

Este patín mide aproximadamente 21.5 cm. para un pie de 24 cm. (el mio!)

Luego podemos decorarlos con una flor como se ve en la primera foto, o con un pompón.

Este patrón está disponible en formato PDF en Etsy en idiomas inglés y francés. Puede entrar a través del Etsy mini del lateral derecho de este blog.

Como hacer graciosos pompones

¡Vaya! El otro día Miri rescató del baúl de los recuerdos su máquina de hacer pompones de cuando era pequeña...

Para probarla hizo estos cuatro pompones. A algunos les añadió ojos, boca y orejas para darles más personalidad. Les puso además unos ganchos para que sirvan como llaveros.

Aunque se pueden hacer pompones sin máquina claro, con dos cartones como se ha hecho toda la vida. Esta manualidad es muy apropiada para las más pequeñas.

Se recortan dos círculos de cartón de 4 cms. de diámetro.
En el centro de cada círculo se recorta otro círculo más pequeño, de 2 cms. de diámetro.
Nos quedarán dos aros parecidos a este:

X 2

Ahora forramos el doble aro de capas de hilo o lana. Cuando está bien cubierto, se cortan todas  las hebras por todo el perímetro del círculo grande. Ya queda hecho el pompón, solo nos queda amarrarlo con una hebra por el centro para que no se desbarate y quitar los cartones.

A continuación, podemos decorarlo con ojos, brazos, pies, etc. a nuestro gusto, con retales de fieltro por ejemplo.

Fabricación de una pulsera de cuero

Con estos sencillos materiales reciclados (una retal de cuero y el cierre de zamack de una pulsera rota) y utensilios tan simples como una regla metálica y un cuter...

ha fabricado José Ángel (padre) esta magnífica pulsera:

Lo único que falta en la fotografía es un poco de tinte para darle ese tono oscuro.

¿Os gusta? Pero esta pulsera no está a la venta jeje... ha sido un regalo para José Ángel jr.

Bisutería vintage: como reconocerla

Algunas de las tías de Miriam, al enterarse de que está fabricando y vendiendo piezas de bisutería, le han regalado varios collares que ya no utilizaban por si los quiere utilizar bien tal cual, bien desmontándolos y volviéndolos a montar con un diseño diferente.

Os queremos mostrar hoy dos piezas que han atraído nuestra atención. Tienen unos añitos... Según vemos en algunas páginas web, para conocer su edad hay que fijarse en los materiales, forma de los cierres, donde se presentan los desgastes, de qué manera están engarzadas las piezas, etc. No es fácil pero es un tema muy interesante por lo tanto habrá que seguir investigando. De momento, he aquí las imágenes:

¿Sabríais calcular en qué año fueron fabricados estos collares?

El cuero no pasa de moda

Hemos puesto últimamente en nuestra tienda virtual unas trabillas para el cabello que fueron fabricadas por José Ángel* en 1972 aproximadamente y estuvieron todos estos años guardadas en una cajita, sin estrenar.

Cuarenta años tienen estas trabillas fabricadas en plena era hippie y ahora de nuevo están totalmente de moda. Pero os diremos una cosa: el cuero que se encuentra hoy no es ni mucho menos del grosor y de la calidad de este cuero más antiguo. Hoy a menudo se utiliza cuerolite, que, grosso modo, se puede decir que es caucho imitando cuero.

José Ángel fabricaba sus propios troqueles para adornar las trabillas y le gustaba darles un toque veteado, como si fuera madera.

Muchas compañeras de estas trabillas se vendieron en el Rastro de Madrid por aquellos años y un día incluso vimos una sujetando la cola de caballo de una actriz en una película española. ¡Lástima que no recordemos el título! Pero eso sí, estamos seguros de que era una de nuestras trabillas porque son inconfundibles...

(José Ángel es el papá de Miri)